martes, 22 de octubre de 2013

Este es el cuento con el que participé en el 1° Concurso Internacional de microrrelatos Prisa Radio... ganó otro man

JETLAG

Habían atravesado la capa de nubes y un sol radiante bañaba todo el interior del avión. Alberto se entregó entonces a su libro, procurando concentrarse junto al creciente ronquido de su compañero de silla.

Años viajando alrededor del mundo, le enseñaron a aprovechar los trayectos para adaptarse a los diversos y bruscos cambios de huso horario. Sin embargo, jamás pudo con pasajeros molestos.

Sentía ser magneto para esos personajes.

Por eso utilizar un maní estratégicamente lanzado a la boca entreabierta que profería los guturales ronquidos, generando una muerte súbita atribuida a esos cambios, fue una técnica depurada con el tiempo.