domingo, 14 de abril de 2013

Palabras más, palabras menos... tercero de tres


La Historia

Siempre hay alguien, siempre. Una vida entera nos pasa por encima cuando buscamos y buscamos, aún cuando muchos dicen que sólo encontramos cuando dejamos de buscar.

El parque oscuro y frío, la noche húmeda que sólo invita a morirse de tristeza, no pueden ser para nada un fondo de rosas para un amor predestinado, como esos que se fabrican en las películas gringas y que nos venden en latas de hora y media de “esperanza”. Sin embargo, ahí se encuentran sus miradas, sus almas solitarias, sus vidas rotas, sus ganas de fumar.

No hay palabras, no hacen falta.

El alba los sorprende aún abrazados, devorándose como si esa fuese su última vez, saboreándose como si se estuviesen diluyendo en su sudor, amándose con ese odio profundo que sólo se siente por uno mismo… cogiendo como animales, copulando a muerte, esa muerte que irremediablemente los castiga con vida.

No hay comentarios: